
Post de Carlos Martín, secretario general de OPEN (Organización Profesional Especialistas del Neumático) y de ANCERA (Asociación Nacional de Comerciantes de Equipos, Recambios, Neumáticos y Accesorios para Automoción de España)
Entre los estudios que la DGT publica puntualmente, ya hace algunos meses llamó especialmente mi atención un dato que sin duda es relevante para nuestro sector. Entonces lo guardé a buen recaudo, para rescatarlo precisamente ahora, con el otoño recién estrenado.
Más de un millón y medio de vehículos podrían estar circulando con neumáticos afectados por defectos graves.
Acuaplanin, salidas de vía, choques en cadena… Por no respetar la profundidad mínima de 1,6mm que debe mantener el dibujo de cualquier neumático. Algo sencillo de verificar (tan fácil como usar el canto de una moneda de Euro, por ejemplo) a nivel particular como, por supuesto, en cualquier revisión de invierno. Dibujo, pero también uniformidad del desgaste y presión. Factores absolutamente para comprobar el buen estado de la única parte del vehículo (démonos cuenta) que realmente tiene contacto con el firme. Los «pies» y «calzado» de un coche. Un elemento sobre el que recae de lleno la seguridad de los usuarios.
La etiqueta del neumático fomenta el uso de neumáticos seguros y eficientes
La entrada en vigor el pasado año del nuevo Reglamento (CE) 2020/740 del Parlamento Europeo y del Consejo del 25 de mayo de 2020 sobre las nuevas etiquetas en los neumáticos, tiene precisamente como objetivo fomentar el uso de neumáticos seguros, duraderos y eficientes en términos de consumo de carburante y que presenten, además, bajos niveles de ruido. Una normativa que también busca la información directa al usuario final para evitar los 454 accidentes con víctimas que en 2019 implicaron neumáticos gastados o defectuosos. Un paso más en la seguridad vial.
Un dato que además mantiene una estrecha relación con la antigüedad de los vehículos implicados en dichos accidentes. Ya que, en un parque envejecido, con algo más de un 38% de vehículos mayores de 15 años, son éstos precisamente los que mayor número de accidentes registra (200 frente a 4 en coches menores de un año).
La renovación del parque es un deber primordial en términos de seguridad y sostenibilidad. No obstante, ante las dificultades que existen para matricular vehículos, acudir al taller a revisar el estado de nuestro vehículo en general y, neumáticos en particular, debería ser una prioridad para cualquier usuario. Es aquí donde la administración (en especial la DGT), asociaciones, empresas y profesionales del sector, debemos ponernos en marcha para que el mensaje llegue al usuario del vehículo.