Las claves son el manejo lento y suave de todos los dispositivos de control del vehículo, incluidos los frenos, el volante, el acelerador y las marchas
Aunque el Estado de Alarma declarado en nuestro país limita la movilidad de los ciudadanos, aún hay colectivos que deben circular por nuestras carreteras para garantizar la seguridad y bienestar de aquellos que deben quedarse en casa. Cuerpos de seguridad del Estado, transportistas, ambulancias… todos ellos prestan un servicio esencial para nuestra sociedad, por ello, ahora más que nunca su seguridad se convierte en prioritaria.
Desde Continental, empresa tecnológica y proveedor internacional de automoción, compartimos algunos consejos para una conducción segura durante el temporal que azota estos días el país, dejando temperaturas bajo cero y nieve en cotas bajas.
La seguridad empieza por el estado de los neumáticos
Lo primero es lo primero: los neumáticos, la única superficie de nuestro vehículo que está en contacto con la carretera. Comprobar la banda de rodadura periódicamente y cambiarlos si fuera necesario es indispensable para garantizar la seguridad al volante.
En la mayoría de los países, el límite legal de la profundidad del dibujo en los neumáticos es de 1,6 mm, pero los expertos en seguridad de Continental recomiendan un mínimo de 3 mm para una seguridad en condiciones húmedas y de 4 mm para neumáticos de invierno. Comprobar que la presión de los neumáticos es la correcta también mejorará la conducción del vehículo y la eficacia del consumo de combustible.
Equipar el vehículo con neumáticos de invierno o con neumáticos all-season aumenta la seguridad ya que tienen un patrón de dibujo específico para una mejor tracción en nieve y en hielo, y usan un único compuesto de caucho que se mantiene flexible con el frío y en condiciones húmedas.
Por último, antes de empezar cualquier viaje, conviene estudiar de antemano el recorrido y el pronóstico del tiempo local así las actualizaciones de tráfico para anticiparse a cualquier cambio que pudiera producirse.
Cómo conducir sobre hielo y nieve
- Conducir el vehículo lenta y suavemente, incluyendo frenos, dirección, aceleración y cambio de velocidades
- Acelerar con cuidado el vehículo usando baja de revoluciones y cambiar a una velocidad más alta tan rápido como sea posible.
- Mantener una mayor distancia de frenado con el vehículo que precede.
- Si el automóvil empieza a patinar, tratar de no entrar en pánico. Conducir suavemente. No retirar tus manos del volante ni frenar con fuerza.
- Encender las luces. Si la visibilidad disminuye por debajo de 100 m, encender los faros antiniebla.
- Si no hay sal en la carretera, evitar conducir por los surcos que dejan las ruedas; la nieve compacta está más helada que la nieve reciente.
- Cargar el depósito del líquido del limpiaparabrisas con una fuerte protección anticongelante para que no se congele en la luna. También habrá que desempañar el interior del parabrisas. Es ilegal conducir sin tener completa visibilidad en todas las ventanillas del coche.
- Retirar toda la nieve de las ventanillas del coche, de los espejos, de los faros y del techo antes de salir; conducir con nieve en el coche es peligroso y podría incumplir la ley. La nieve podría desprenderse de tu vehículo, por ejemplo, y obstaculizar la visión de otros conductores.